No sé por qué escribo poesía

"Fantasies about a found glove, dedicated to the lady who lost it" (1878), por Max Klinger (1857-1920)

La poesía es un juego de malabares. O pura supervivencia. O las dos cosas. ¿Quién no ha escrito jamás un verso? Por amor se empieza y por trabajo se acaba. Y se mantiene por diversión o porque va la vida en ello.

Empecé escribiendo poesía por amor y sigo haciéndolo por inercia. Por llenar el tiempo. Pero no sé realmente por qué aún a día de hoy continúo con esto. Dos libros de poesía y colaboraciones en revistas. Hacer literatura por aburrimiento. Descubrir poco a poco que los versos son extremos: o te aportan cosas o te dan el mismísimo silencio. 

Pero sigo aquí. Casi un poema diario. No se por qué sigo escribiendo poesía. Pero me entretiene.